Según Coffield (2005), aprender se relaciona con “cambios significativos en la capacidad, comprensión, actitudes o valores por parte de individuos, grupos, organizaciones o de la sociedad”
El sentido de aprender radica en capacitar al individuo en encontrar soluciones a situaciones que obstaculizan su desarrollo cotidiano dentro del entorno en que se encuentra inmerso, esto a partir de la adquisición de datos hasta la forma más compleja de recopilar y organizar la información.
Desde un punto de vista físico-químico, la Neurociencia se refiere al estudio científico de los mecanismos neuronales subyacentes a la cognición. Estudia más ampliamente el funcionamiento del cerebro y la psicología cognitiva, que se enfoca sobre los sustratos neuronales de los procesos mentales y de sus manifestaciones en el comportamiento.
En la siguiente dirección se presenta una breve explicación del proceso de aprendizaje y su estudio desde el punto de vista de la neurociencia.
http://www.slideshare.net/javiercr
En complemento observen este video La ciencia de la mente
sábado, 22 de mayo de 2010
martes, 18 de mayo de 2010
¿Debo o no devolverme cuando los alumnos no dominan ciertos conocimientos o destrezas?
Esta es una pregunta que nos hacemos los profesores al iniciar la enseñanza de un tema, el cual requiere de bases que debían estar ya presentes en el esquema mental del alumno.
En todo proceso de E-A, existen dos actores principales, la fuente emisor de conocimiento, como lo es un profesor y el receptor de los conceptos, llámese el alumno; además debe existir un proceso de transferencia y asimilación de conceptos que se transforman en conocimiento, es en este punto donde se necesita valorar de manera formativa y sumativa, si el alumno, hizo suyo el conocimiento, siendo este acto de valoración, lo que se puede llamar los criterios de evaluación de un curso, los cuales deben estar establecidos, de tal forma que aseguren la adecuada formación de los futuros profesionales.
Si partimos del hecho que la enseñanza es un proceso gradual e integral de conceptos que vienen de procesos de enseñanza-aprendizajes secuenciales; estos procesos deberían contar con la certeza que los alumnos que aprueban esos procesos tienen los conocimientos que los capacitan en una serie de competencias, las cuales son bases de posteriores procesos de E-A, y si al llegar a nuestros cursos, estos estudiantes no poseen esas bases, se nos presenta la interrogante ¿Debo o no devolverme cuando los alumnos no dominan ciertos conocimientos o destrezas?.
De hecho, esta situación le presenta al profesor dos inconvenientes, una que implica cumplir con lo previsto para su curso, y otra, que no puede realizar su proceso E-A de manera adecuada, ya que carece de una base sólida sobre la cual sustentar su enseñanza. Ante esta situación, y muy a pesar del posible retraso que eso signifique, el profesor debe retomar y reafirmar aquellas bases de conocimiento que posee sus alumnos y llevar al grupo como un todo, a un mismo nivel de conocimiento, de manera que esta nivelación le facilite ejecutar una proceso de E-A efectivo.
En síntesis, en la medida de lo posible se debe asegurar que los alumnos que recibimos en nuestros procesos E-A, posean las bases de conocimiento necesarias que los capaciten para asimilar, de manera adecuada, los conceptos que se les ha de transmitir, y en caso de ser necesario, realizar un proceso de reforzamiento de esas bases, a pesar que esto implique un mayor esfuerzo del estudiante y el profesor en conjunto.
En todo proceso de E-A, existen dos actores principales, la fuente emisor de conocimiento, como lo es un profesor y el receptor de los conceptos, llámese el alumno; además debe existir un proceso de transferencia y asimilación de conceptos que se transforman en conocimiento, es en este punto donde se necesita valorar de manera formativa y sumativa, si el alumno, hizo suyo el conocimiento, siendo este acto de valoración, lo que se puede llamar los criterios de evaluación de un curso, los cuales deben estar establecidos, de tal forma que aseguren la adecuada formación de los futuros profesionales.
Si partimos del hecho que la enseñanza es un proceso gradual e integral de conceptos que vienen de procesos de enseñanza-aprendizajes secuenciales; estos procesos deberían contar con la certeza que los alumnos que aprueban esos procesos tienen los conocimientos que los capacitan en una serie de competencias, las cuales son bases de posteriores procesos de E-A, y si al llegar a nuestros cursos, estos estudiantes no poseen esas bases, se nos presenta la interrogante ¿Debo o no devolverme cuando los alumnos no dominan ciertos conocimientos o destrezas?.
De hecho, esta situación le presenta al profesor dos inconvenientes, una que implica cumplir con lo previsto para su curso, y otra, que no puede realizar su proceso E-A de manera adecuada, ya que carece de una base sólida sobre la cual sustentar su enseñanza. Ante esta situación, y muy a pesar del posible retraso que eso signifique, el profesor debe retomar y reafirmar aquellas bases de conocimiento que posee sus alumnos y llevar al grupo como un todo, a un mismo nivel de conocimiento, de manera que esta nivelación le facilite ejecutar una proceso de E-A efectivo.
En síntesis, en la medida de lo posible se debe asegurar que los alumnos que recibimos en nuestros procesos E-A, posean las bases de conocimiento necesarias que los capaciten para asimilar, de manera adecuada, los conceptos que se les ha de transmitir, y en caso de ser necesario, realizar un proceso de reforzamiento de esas bases, a pesar que esto implique un mayor esfuerzo del estudiante y el profesor en conjunto.
lunes, 17 de mayo de 2010
Semana 2 ¿Cómo debemos educar a los profesionales del futuro?
Por. Lic. Javier Monge M.Sc.
Este ensayo presenta una reflexión sobre la necesidad de preparar al profesional del futuro, en función de su adaptabilidad a los cambios inexorables de la sociedad globalizada. Para ello se consideran las propuestas hechas por los señores Howard Gardner, Kai-ming Cheng, Frank Levy y Richard Murnane, quienes han tratado la temática de las competencias profesiones en función de la era global.
Para iniciar esta reflexión, es conveniente conocer ¿Qué es una competencia profesional?; para la OIT, una competencia se define como “la capacidad efectiva para llevar a cabo exitosamente una actividad laboral plenamente identificada. La competencia laboral no es una probabilidad de éxito en la ejecución de un trabajo; es una capacidad real y demostrada.”. El adecuado desarrollo de esta competencia profesional, se logra siempre y cuando el proceso instruccional sea llevado a cabo según el contexto en el que participarán nuestros estudiantes, es por ello que se debe enseñar para el futuro, y no solo para vivir el instante.
Para el profesor Gardner, existe la necesidad de preparar a los jóvenes en función de aprovechar el progreso científico-tecnológico y sus relaciones socio-afectivas, con la intención desarrollar la capacidad de adaptación a los entornos laborales del futuro. Para ello, es necesario potenciar las cinco mentes del futuro:
1. La MENTE DISCIPLINADA, es aquella que ayuda a trabajar continuamente en un esfuerzo de mejora permanente; aprendiendo nuevas formas de pensar y volviéndose un experto en alguna profesión u oficio.
2. La MENTE SINTETIZADORA, permite discernir, tener criterio para escoger la información que es importante de la que no lo es, hacerse un juicio de valor y comunicarlo efectivamente.
3. La MENTE CREADORA, nos permite hacer nuevas preguntas, nuevas síntesis, encontrar nuevas respuestas, y tomar riesgos. Las personas que logren desarrollar estas competencias serán aquellas que reciban las grandes recompensas a su trabajo en el siglo XXI. Todo lo que pueda hacer una maquina a través de un proceso automatizado, lo hará.
4. La MENTE RESPETUOSA, la diversidad es un hecho de la vida dentro y fuera del hogar. Hoy en día hay necesidad de ser respetuoso, entender a los demás, sus puntos de vista, sus motivaciones, su inteligencia emocional, más allá de una mera tolerancia, colocando nuestra confianza en los demás, independientemente de nuestras diferencias, nacionalidades, etnias, religiones, estratos socioeconómicos, etc.
5. La MENTE ETICA, que envuelve la capacidad de pensar en uno mismo como trabajador, como ciudadano de una comunidad, de una nación, y como ciudadano planetario.
El sentido de activar estas cinco inteligencias, es capacitar al futuro profesional en la adaptabilidad a nuevos entornos globalizados, en donde la especialización laboral estará constantemente cambiando.
Por otro lado, F. Levy y R. Murnane, mencionan en su artículo “Cómo el trabajo computadorizado y la globalización moldean las demandas por las habilidades humanas”, que debido a los cambios tecnológicos, los perfiles labores han cambiado, al extremo de que muchos trabajos que implican actividades repetitivas y que presentan reglas definidas de ejecución, son efectuados por sistemas computadorizados; en complemento, aquellas labores que no son posible estandarizarlas y que presentan ambigüedad en su ejecución son realizadas por los seres humanos, en este punto lo importante es tener claro que la persona y en especial el profesional, debe desarrollar la capacidad de modelar su trabajo en función de las exigencias del mercado global al que se va incorporar. Con el fin de desarrollar esta capacidad adaptativa, es necesario cultivar las siguientes habilidades humanas, a- Pensamiento especializado, b- Comunicación compleja, c-Tareas cognitivas rutinarias, d- Tareas manuales rutinarias y e-Tareas manuales no rutinarias.
Para Kai-ming Cheng, la adaptabilidad laboral está en función de las características antropológicas de las necesidades laborales, es decir, las formas de trabajar y de organizarse internamente dentro de las organizaciones, se ha modificado en función de las exigencias del mercado global, de modo que las empresas han tenido que diversificar sus métodos de trabajo y de cómo competir en mercado más exigentes y cambiantes; esto hace necesario contar con trabajadores que posean diversas competencias, de forma que sean capaces diseñar soluciones y tomar decisiones, trabajar en equipo, ser capaces de adaptarse a entornos de trabajos flexibles, poseer capacidades de negociación, y contar con valores como la lealtad hacia la organización. Para Cheng, existe una gran interrogante, ¿Estarán los sistemas educativos actuales, desarrollando una función de preparación en función de estas necesidades?; y la respuesta es no, ya que los esquemas educativos no cambian tan rápido como las necesidades de los mercados, es decir, los sistemas educativos no son proactivos a los requerimientos de la sociedad.
Ante este panorama, las instituciones deberán promover ejercicios en los cuales, los estudiantes deben ejercitar o desarrollar ciertas capacidades en función de las características que tendrán los problemas a los que se enfrentarán en el futuro laboral.
En síntesis, para Gardner, Cheng, Levy y Murnane, existe un hecho concreto, y es que los futuros profesionales, necesitan desarrollar una serie de competencias que los capaciten en función de su adaptabilidad laboral ante los constantes cambios en los métodos de producción o de brindar servicios, los que, muy probablemente serán desarrollados a través de equipos especializados a nivel global, y que estarán impactados por el uso de tecnologías, lo que implicará poseer dominio de una variedad de especialidades.
Implicaciones de este nuevo perfil sobre su la práctica docente
Los docentes universitarios tiene una gran tarea que desarrollar, ya que, deben preparar a los estudiantes a ser capaces de resolver problemas que todavía no existen, es decir, un profesor de informática, no le puede enseñar a un alumno a utilizar un software que aún no ha sido desarrollado, este hecho en síntesis es el punto de partida de cómo los profesores debe cambiar su práctica educativa, a una en la cual desarrolle en los estudiantes aquellos conceptos que no van a cambiar , a pesar de que las tecnologías cambien, por ejemplo, en el curso de sistemas de información para administradores, que imparto, muchos alumnos llegan con la expectativa de aprender a utilizar un programa que les ayude a gestionar una empresa, pero en su lugar, se les enseña cómo funcionan los sistemas de información, los diferentes tipos de sistemas de información, y como los sistemas son utilizados en función de su alineación con los objetivos estratégicos de la organización; es aquí donde se aplica el concepto “enseñar para el futuro”, ya que, los alumnos contarán con los conceptos necesarios para adaptar los sistemas de información que existan en el futuro a las necesidades de la organización, sin importar el tipo de tecnologías de programación o de base de datos que se utilice, si el alumno hizo suyo el concepto y lo tradujo en conocimiento será capaz de incorporar la tecnologías, al quehacer de la organización. En conclusión, los profesores debemos motivar en los alumnos las capacidades adaptativas necesarias, que los ayuden a enfrentarse a un mundo constantemente cambiante.
Este ensayo presenta una reflexión sobre la necesidad de preparar al profesional del futuro, en función de su adaptabilidad a los cambios inexorables de la sociedad globalizada. Para ello se consideran las propuestas hechas por los señores Howard Gardner, Kai-ming Cheng, Frank Levy y Richard Murnane, quienes han tratado la temática de las competencias profesiones en función de la era global.
Para iniciar esta reflexión, es conveniente conocer ¿Qué es una competencia profesional?; para la OIT, una competencia se define como “la capacidad efectiva para llevar a cabo exitosamente una actividad laboral plenamente identificada. La competencia laboral no es una probabilidad de éxito en la ejecución de un trabajo; es una capacidad real y demostrada.”. El adecuado desarrollo de esta competencia profesional, se logra siempre y cuando el proceso instruccional sea llevado a cabo según el contexto en el que participarán nuestros estudiantes, es por ello que se debe enseñar para el futuro, y no solo para vivir el instante.
Para el profesor Gardner, existe la necesidad de preparar a los jóvenes en función de aprovechar el progreso científico-tecnológico y sus relaciones socio-afectivas, con la intención desarrollar la capacidad de adaptación a los entornos laborales del futuro. Para ello, es necesario potenciar las cinco mentes del futuro:
1. La MENTE DISCIPLINADA, es aquella que ayuda a trabajar continuamente en un esfuerzo de mejora permanente; aprendiendo nuevas formas de pensar y volviéndose un experto en alguna profesión u oficio.
2. La MENTE SINTETIZADORA, permite discernir, tener criterio para escoger la información que es importante de la que no lo es, hacerse un juicio de valor y comunicarlo efectivamente.
3. La MENTE CREADORA, nos permite hacer nuevas preguntas, nuevas síntesis, encontrar nuevas respuestas, y tomar riesgos. Las personas que logren desarrollar estas competencias serán aquellas que reciban las grandes recompensas a su trabajo en el siglo XXI. Todo lo que pueda hacer una maquina a través de un proceso automatizado, lo hará.
4. La MENTE RESPETUOSA, la diversidad es un hecho de la vida dentro y fuera del hogar. Hoy en día hay necesidad de ser respetuoso, entender a los demás, sus puntos de vista, sus motivaciones, su inteligencia emocional, más allá de una mera tolerancia, colocando nuestra confianza en los demás, independientemente de nuestras diferencias, nacionalidades, etnias, religiones, estratos socioeconómicos, etc.
5. La MENTE ETICA, que envuelve la capacidad de pensar en uno mismo como trabajador, como ciudadano de una comunidad, de una nación, y como ciudadano planetario.
El sentido de activar estas cinco inteligencias, es capacitar al futuro profesional en la adaptabilidad a nuevos entornos globalizados, en donde la especialización laboral estará constantemente cambiando.

Para Kai-ming Cheng, la adaptabilidad laboral está en función de las características antropológicas de las necesidades laborales, es decir, las formas de trabajar y de organizarse internamente dentro de las organizaciones, se ha modificado en función de las exigencias del mercado global, de modo que las empresas han tenido que diversificar sus métodos de trabajo y de cómo competir en mercado más exigentes y cambiantes; esto hace necesario contar con trabajadores que posean diversas competencias, de forma que sean capaces diseñar soluciones y tomar decisiones, trabajar en equipo, ser capaces de adaptarse a entornos de trabajos flexibles, poseer capacidades de negociación, y contar con valores como la lealtad hacia la organización. Para Cheng, existe una gran interrogante, ¿Estarán los sistemas educativos actuales, desarrollando una función de preparación en función de estas necesidades?; y la respuesta es no, ya que los esquemas educativos no cambian tan rápido como las necesidades de los mercados, es decir, los sistemas educativos no son proactivos a los requerimientos de la sociedad.
Ante este panorama, las instituciones deberán promover ejercicios en los cuales, los estudiantes deben ejercitar o desarrollar ciertas capacidades en función de las características que tendrán los problemas a los que se enfrentarán en el futuro laboral.
En síntesis, para Gardner, Cheng, Levy y Murnane, existe un hecho concreto, y es que los futuros profesionales, necesitan desarrollar una serie de competencias que los capaciten en función de su adaptabilidad laboral ante los constantes cambios en los métodos de producción o de brindar servicios, los que, muy probablemente serán desarrollados a través de equipos especializados a nivel global, y que estarán impactados por el uso de tecnologías, lo que implicará poseer dominio de una variedad de especialidades.
Implicaciones de este nuevo perfil sobre su la práctica docente
Los docentes universitarios tiene una gran tarea que desarrollar, ya que, deben preparar a los estudiantes a ser capaces de resolver problemas que todavía no existen, es decir, un profesor de informática, no le puede enseñar a un alumno a utilizar un software que aún no ha sido desarrollado, este hecho en síntesis es el punto de partida de cómo los profesores debe cambiar su práctica educativa, a una en la cual desarrolle en los estudiantes aquellos conceptos que no van a cambiar , a pesar de que las tecnologías cambien, por ejemplo, en el curso de sistemas de información para administradores, que imparto, muchos alumnos llegan con la expectativa de aprender a utilizar un programa que les ayude a gestionar una empresa, pero en su lugar, se les enseña cómo funcionan los sistemas de información, los diferentes tipos de sistemas de información, y como los sistemas son utilizados en función de su alineación con los objetivos estratégicos de la organización; es aquí donde se aplica el concepto “enseñar para el futuro”, ya que, los alumnos contarán con los conceptos necesarios para adaptar los sistemas de información que existan en el futuro a las necesidades de la organización, sin importar el tipo de tecnologías de programación o de base de datos que se utilice, si el alumno hizo suyo el concepto y lo tradujo en conocimiento será capaz de incorporar la tecnologías, al quehacer de la organización. En conclusión, los profesores debemos motivar en los alumnos las capacidades adaptativas necesarias, que los ayuden a enfrentarse a un mundo constantemente cambiante.
lunes, 10 de mayo de 2010
Semana 1. ¿Qué sabemos sobre aprender y educar?
¿Por qué solo los seres vivos tienen la capacidad de ser partícipes de un proceso de enseñanza-aprendizaje? Si se analiza la razón de ser de un proceso de E-A, es claro que este se da en función de enseñar a un ser vivo, para que tenga la capacidad de adaptarse al entorno, por ejemplo un profesor le enseña a un alumno las matemáticas, y una vez aprendidas son utilizadas para resolver problemas significativos para el alumno, por otro lado, los elementos no orgánicos o inertes, no requieren aprender para adaptarse al medio, ellos ya están inmersos en su entorno y no pueden cambiar esa situación .
Para poder realizar una comparación de estos objetos o situaciones, en función de un proceso de enseñanza-aprendizaje, es conveniente tener claro los componentes que están presentes en este proceso; uno es la fuente de conocimiento, que ejecuta la función de enseñanza, otro es el medio utilizado para transmitir ese conocimiento, y que se ve reflejado a través de la ejecución de una serie actividades o experiencias educativas que buscan ser significativas para el receptor de ese conocimiento, en el tanto, el individuo modifique su esquema de conocimiento , y le permita adaptarse a su entorno, o bien modificarlo a su conveniencia. Por lo anterior, y si nos referimos propiamente al proceso de E-A, se puede decir que se requiere de tres elementos claves para que se dé: a- Fuente de conocimiento b- el medio para transferir ese conocimiento y c- el receptor que aprende ese conocimiento y lo incorpora al suyo propio.
Si partimos del hecho que son solo los seres vivos los que tienen la capacidad de aprender, en función de su necesidad de adaptación al entorno, se puede indicar que el cuarzo, es un mineral que se formó por la combinación de otros cristales, los cuales a estar sujetos condiciones de presiones, temperaturas, agua, etc., se combinaron de tal manera que dio como resultado un cristal, como tal el cuarzo no aprendió a ser lo que es, fue el resultado de una combinación de condiciones naturales. En el caso del discurrir de un río dentro de un cauce, no es sinónimo que el agua ha aprendido a seguir ese camino en función de la conformación del relieve de la zona, por tal motivo no se puede decir que el rió participe de un proceso E-A.
La caja de herramientas simboliza el andamiaje utilizado para transferir y poner en práctica los conocimientos brindados, y por tanto, si participa en un proceso E-A. Ahora bien, la crisálida, las plantas y las muchachas jugando futbol, tienen en común que son seres vivos, de manera que poseen la capacidad de adaptarse al medio; en caso de la crisálida, es solo un estado transitivo de una larva que se transformará en una mariposa, y en este caso se podría pensar que es similar al proceso que lleva a cabo un estudiante que modifica su esquema mental y lo transforma. En el caso de las plantas, se nutren de la tierra y crecen, dando frutos, de tal forma, los estudiantes se nutren de los conceptos brindados a través de la enseñanza. Las muchachas jugando, reflejan que han aprendido, y que se sienten capaces de realizar una actividad, de forma que el proceso de E-A, ha sido exitoso.
En conclusión, solo los seres vivos son capaces de participar en un proceso de enseñanza-aprendizaje; dentro de este proceso existe un emisor de conocimiento, un andamiaje y un receptor, este proceso implica que se dé un cambio en el receptor para que sea considerado aprendizaje. Existen en la naturaleza, cambios físicos, tales como la erosión de un cauce por donde discurre un rio, o la conformación de un mineral a causa de la combinación de elementos químicos y geofísicos que dieron como resultado un cristal con características particulares, esto no implica que estos elementos hayan aprendido a ser lo que son; solo los seres vivos pueden modificar su esquema natural en función de la necesidad de adaptarse a su entorno, y es ahí donde a través de la adquisición de conocimiento, se da la adaptación o modificación de su medio en función de sus necesidades; es en este acto es donde se puede pensar que el proceso E-A, fue efectivo, ya que permitió que se diera aprendizaje en el receptor.
Para poder realizar una comparación de estos objetos o situaciones, en función de un proceso de enseñanza-aprendizaje, es conveniente tener claro los componentes que están presentes en este proceso; uno es la fuente de conocimiento, que ejecuta la función de enseñanza, otro es el medio utilizado para transmitir ese conocimiento, y que se ve reflejado a través de la ejecución de una serie actividades o experiencias educativas que buscan ser significativas para el receptor de ese conocimiento, en el tanto, el individuo modifique su esquema de conocimiento , y le permita adaptarse a su entorno, o bien modificarlo a su conveniencia. Por lo anterior, y si nos referimos propiamente al proceso de E-A, se puede decir que se requiere de tres elementos claves para que se dé: a- Fuente de conocimiento b- el medio para transferir ese conocimiento y c- el receptor que aprende ese conocimiento y lo incorpora al suyo propio.
Si partimos del hecho que son solo los seres vivos los que tienen la capacidad de aprender, en función de su necesidad de adaptación al entorno, se puede indicar que el cuarzo, es un mineral que se formó por la combinación de otros cristales, los cuales a estar sujetos condiciones de presiones, temperaturas, agua, etc., se combinaron de tal manera que dio como resultado un cristal, como tal el cuarzo no aprendió a ser lo que es, fue el resultado de una combinación de condiciones naturales. En el caso del discurrir de un río dentro de un cauce, no es sinónimo que el agua ha aprendido a seguir ese camino en función de la conformación del relieve de la zona, por tal motivo no se puede decir que el rió participe de un proceso E-A.
La caja de herramientas simboliza el andamiaje utilizado para transferir y poner en práctica los conocimientos brindados, y por tanto, si participa en un proceso E-A. Ahora bien, la crisálida, las plantas y las muchachas jugando futbol, tienen en común que son seres vivos, de manera que poseen la capacidad de adaptarse al medio; en caso de la crisálida, es solo un estado transitivo de una larva que se transformará en una mariposa, y en este caso se podría pensar que es similar al proceso que lleva a cabo un estudiante que modifica su esquema mental y lo transforma. En el caso de las plantas, se nutren de la tierra y crecen, dando frutos, de tal forma, los estudiantes se nutren de los conceptos brindados a través de la enseñanza. Las muchachas jugando, reflejan que han aprendido, y que se sienten capaces de realizar una actividad, de forma que el proceso de E-A, ha sido exitoso.
En conclusión, solo los seres vivos son capaces de participar en un proceso de enseñanza-aprendizaje; dentro de este proceso existe un emisor de conocimiento, un andamiaje y un receptor, este proceso implica que se dé un cambio en el receptor para que sea considerado aprendizaje. Existen en la naturaleza, cambios físicos, tales como la erosión de un cauce por donde discurre un rio, o la conformación de un mineral a causa de la combinación de elementos químicos y geofísicos que dieron como resultado un cristal con características particulares, esto no implica que estos elementos hayan aprendido a ser lo que son; solo los seres vivos pueden modificar su esquema natural en función de la necesidad de adaptarse a su entorno, y es ahí donde a través de la adquisición de conocimiento, se da la adaptación o modificación de su medio en función de sus necesidades; es en este acto es donde se puede pensar que el proceso E-A, fue efectivo, ya que permitió que se diera aprendizaje en el receptor.
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